«El ayuntamiento de Arona ha procedido a expedientar al componente del
foro Cívico Suroeste, que tramitó la solicitud de la manifestación del
pasado día 21 de abril, por haber colocado carteles publicitario de la
manifestación en espacios públicos, que según dice la normativa
municipal están prohibidos.El Foro Cívico Suroeste alega que estos sólo es una vendetta contra el
colectivo, pues son miembros del mismo, personas que luchan contra la
corrupción en el municipio, y que lo han tomado como un acto de
desesperación con ataques personales, que pretenden amedrentar los
movimientos sociales que se crean por esta parte de la isla.Para el movimiento social esta actitud del Ayuntamiento de Arona, es
desproporcionada y alejada de la realidad, ya que no se puede
sancionar a un miembro por haber colocado carteles, cuando esta tarea
se llevó a cabo por varias personas, además el alegato del
Ayuntamiento al decir que existen espacios adaptados para ese fin, no
es del todo cierto, porque dichos espacios son limitados y, los
carteles colocados en los mismos, fueron tapados por otros, sin que el
consistorio sancionase o interviniese en la perversa actitud de
vulnerar la libertad de expresión de los ciudadanos.El foro Cívico Suroeste asevera que en todo el municipio y, en el
mobiliario urbano, se coloca publicidad de entidades comerciales y
mercantiles, muchas de ellas actuando en economía sumergida, así como
promoción de servicios de prostitución, sin que las autoridades
locales hagan nada por su retirada, quedando demostrado que esta
actitud es una acto destinado a ser ejemplar y ejemplarizante contra
los que osen a no rendir pleitesía al poder caciquil.También los miembros del Foro Cívico Suroeste ven en esta sanción la
realidad de los ediles aroneros, que en prensa dicen defender la
reivindicación de un Hospital público y, por otro lado demonizan a
quienes hacen pública dicha reivindicación. Reivindicación que se
engloba en la defensa de un derecho constitucional, por lo que habría
que preguntarse si los gobernantes de Arona acatan la constitución, o
si simplemente son demócratas, al atacar al derecho fundamental de
manifestarse.