Y este es solo el precio de la factura pagada durante la última década al redactor del Plan General de Arona (Coderch Estudio de Arquitectura y Urbanismo SL). Hay más facturas…

Si a ello se suma el coste del personal municipal dedicado durante esta década al Plan General de Ordenación (PGO), sus horas extra (mogollón mogollón), los sueldos de los concejales de Urbanismo que han manejado ese planeamiento, los de sus asesores, sus cursos de formación, el gasto en ruedas y carburante -chófer incluido- para reuniones técnicas y políticas en Santa Cruz y para reuniones empresariales, las miles de horas de charlas telefónicas, las comidas y comilonas a costa del Plan, el coste de los bandos, anuncios y entrevistas pagadas insertadas en prensa y, entre otros, el gasto en abogados, su precio supera con holgura los dos millones de euros (y seguramente me esté quedando muy corta).

Tras máás de una década de vicisitudes, mentiras, tropezones y problemillas legales, el PGO de Arona logró entrar en vigor el pasado mes de diciembre. Hace apenas seis meses.

Ejem, y tanto el nuevo concejal de Urbanismo de Berto el alcalde, Carmelo García, como su antecesor en el cargo y rival de partido, Antonio Sosa, han manifestado públicamente que ya toca modificar el documento. O sea, que toca seguir pagando a estudios como el de Coderch para que readapte el carísimo PGO de Arona. 694.000 euros de factura solo por su revisión y adaptación a las nuevas normativas que iban surgiendo durante la última década. Sí que le ha rentado a alguno la insultante tardanza político-técnica en sacar adelante el documento…

Y al tran tran, que éste es el coste de la factura pagada por el Ayuntamiento aronero al estudio que lidera Jorge Coderch durante la última década. Pero es que la anterior cobró otra también de aúpa. Y a este paso, tiene garantizada la facturación una década más…

Les posteo el detalle de la facturita que acaba de salir de debajo de la alfombra bertista. Por cierto, ¿éste no era el Plan General que iba a generar miles de puestos de trabajo y a sacar a Arona de la crisis? Porque cualquiera lo diría…

Facturas pagadas por el Ayuntamiento de Arona durante la última década al redactor del PGO (Coderch Estudio de Urbanismo y Arquitectura). Total: 694.772 euros.

Y como Félix Rojas se ha pegado un curro de la leche tirando de archivo y de memoria para documentar esta carísima noticia de 694.772 euros, les pego también el artículo que publicó en del Digital de Canarias.

El Ayuntamiento de Arona ha desembolsado en diez años, 694.772,91 euros, para la elaboración del PGO

Esta inmensa cantidad de dinero ha ido a parar a manos del arquitecto Coderch

«Diez años. Una eternidad. Un tiempo en el que un político salvaje, un auténtico Mesías nacionalista, un cínico inmenso ha conseguido lo imposible: destruir un Ayuntamiento y de paso al pueblo que representa, romper todas las barreras legales y éticas y levantar el mayor monumento de corrupción que anida en esta Isla. Y tiene solamente este nombre: José Alberto González Reverón, un chico de Buzanada al que los vicios políticos lo volvieron loco y que ahora enfermo de poder, malvive en su trono de hiel a la espera que lo descabalguen los jueces.

Como la Reina Malvada de la película Blancanieves y el Cazador, necesita la vitalidad de los otros para sobrevivir y mantiene a todos los suyos hechizados con el dinero de los presupuestos y propiciando corruptelas, engaños, chanchullos, favores, prebendas y todo lo que define al clientelismo político. Y todo ello queda reflejado en documentos, en papeles de todo tipo, pero por encima de todos ellos está el Plan General, esa Biblia satánica en la que están reflejadas todas las maldades y todas las conjuras de este alcalde marioneta, prisionero de los poderosos, de los de siempre y que lo usan para salvaguardar sus sucios negocios.

Pero para que haya Plan General hace falta un técnico que se preste a todo. Uno que además de ayudarlos, les permita salir adelante ante cualquier eventualidad. Y Arona ha encontrado en Coderch Estudio de Urbanismo y Arquitectura SL el mejor instrumento técnico para estos malsanos deseos. Y como hablamos de artes negras, está claro que este tipo de servicios hay que pagarlos y bien. De eso se trata. En este caso la cantidad desembolsada desde las arcas públicas asciende a 694.772,91 euros. Todo este dinero por diez años para elaborar un plan general que a día de hoy, todavía no está en vigor.

Año 2002. Penúltimo del reinado de Miguel Delgado. Un alcalde débil, irresoluto. Preso del clan corrupto que domina la Oficina Técnica y el Ayuntamiento. Barrios ya no gobierna, pero domina en la sombra. Berto es concejal de Servicios Sociales y está en manos de Tata, el verdadero rey en la sombra, pero que sabe que jamás será alcalde y que nunca podría ganar las elecciones. El Plan General se intenta terminar y llevar a cabo. Y ahí comienzan los pagos a Coderch. Lo ha elegido Tata, que lo conoce y sabe que se puede confiar en él. El primero se gesta el 22 de octubre de 2002. Son 25.243 euros. Es por el 50% de la minuta de honorarios profesionales por la adaptación profesional a la ley del Territorio. Le siguen el 31 de enero el otro 50% con la misma cantidad (25.243 euros). En los juzgados una petición penal sobre licencias firmada por Felipe Campos con datos de Francisco Santamaría, duerme el sueño de los justos, nadie le da trámite.

Es el último año de Miguel Delgado. Apogeo de Tata. Berto candidato. Y siguen las tropelías de los técnicos, mientras tiene lugar uno de los más sonados y primeros escándalos. Caso Nooctúa. Se producen tres pagos: 2.100 euros el 19 de mayo de 2003 por una minuta de honorarios por el Plan General. 252 euros por copias de anexos I y II del Plan General y 1.732, 50 euros por elaboración de los planos de ordenación estructurada y pormenorizada del Plan, ambas de fecha 15 de julio de 2003, con Berto de alcalde en alianza con Manuel Barrios, concejal de Urbanismo.

Dos años después, 2005, surge un pago más. 8 de marzo. 2.100 euros para dos copias del Plan General. Son tiempos de Berto diciendo por todas las esquinas que Barrios es un corrupto, pero sin decírselo a la cara, con humillación de Sosa, asesor en esos tiempos, a cuenta del viejo político, que asumió las gestiones más que sospechosas de Félix Sierra al frente de Urbanismo y que no cuestionó a Coderch, siempre el mismo, siempre a los mandos. Y son tiempos de ataque de Francisco Santamaría al PGO, con un desconocido José Julián Mena y un atrevido José Antonio Reverón, en un discreto segundo plano, pero atento a toda la podredumbre aronera. Barrios sigue su camino apoyado en dos bastiones negros: Roberto de Luis y Elíseo de la Rosa. Y se desarrolla oculto el drama de los empresarios vascos. Proguito SL Un nombre anodino que se convertirá después en piedra de escándalo.

2 de noviembre de 2005. Barrios se hace el chulo y ayudado por Tata, que sigue de cerca todos los movimientos, diseña el Plan General como se ha hecho desde el principio, al dictado de los empresarios. Quien tuviera su agenda, vería como se diseñó todo. Es el momento de los grandes pagos. 143.6590,40 euros a Coderch por el documento de revisión del PGO de Arona.

1 de marzo de 2006. Sigue Barrios y Berto sabe ya de los movimientos de éste en una reunión secreta con el sobrino de Roberto de Luis, tocado por los escándalos mediáticos. Pero da igual. El PGO debe seguir. Otro pago de 80.182,20 euros a cuenta del documento de revisión.

7 de julio de 2006. Son los últimos tiempos de tranquilidad. La licencia de los vascos sigue bloqueada y se suceden los duros episodios en su parcela. Los socialistas en sus enormes contradicciones, fruto de los titubeos de Paco Santamaría, preparan la denuncia del caso Arona, el primero, el más grande de todos por ahora. José Antonio Reverón es el alma mater de ella, es el que recopila todo. Ese día surge el pago de 185.315,82 euros por redacción de documento y aprobación inicial y provisional del PGO.

Estalla el caso Arona

14 de diciembre de 2007. Berto ha ganado las elecciones por mayoría absoluta. Presenta el gobierno de los universitarios, sin la vieja guardia corrupta. Los socialistas han presentado la denuncia del caso Arona, que lleva Nelson Díaz Frías, que la admite a trámite, pero no les renta electoralmente. Comienza el proceso que estalla en algo muy grande, cuando el empresario José Ramón Ansorena, da el paso y provoca el sumario del que ahora todos cosechamos los datos del peor gobierno municipal de Tenerife. José Antonio es protagonista a su pesar y sale día sí y día no con un nuevo escándalo, como el de Caboges, un pelotazo que consiguió parar, para deleite de muchos y desgracia de los de siempre. A Coderch, ajeno a todo esto se le pagan 123.543,89 euros por el texto refundido del Plan General.

19 de diciembre de 2008. Sigue la instrucción secreta del sumario del caso Arona. Pinchazo tras pinchazo. Pero se recrudece la lucha contra el PGO. Berto ya asume solo la batalla, con un Barrios descabalgado, pero siempre frito por estar en la pomada y con los socialistas en crisis a cuenta del PGO y el caso Arona, unidos ambos por los mismos y delirantes protagonistas. 18.889,50 euros que se le pagan a Coderch por el Texto Refundido 1 de junio de 2008. Cuatro días antes salta una grabación donde Coderch admite lo inadmisible y donde se le ve como le ocurrió en el caso Unión en Lanzarote, donde también está, muy esclavo del poder político. La grabación es brutal. Y deja a las claras hasta donde llegó y llegará el alcalde para servir a sus amigos. La dependencia de los poderosos es hasta obscena.

25 de marzo de 2010. Dos años intensos, muy intensos. Batalla judicial en todos los frentes. Berto, Sosa y el clan de los bedeles. Conspiran para hacer caer a Santamaría y a José Antonio Reverón. Felipe Campos y Antonio Espinosa arrecian en sus demandas y en sus análisis sobre esta gestión. Incluso Coderch se ve envuelto en estas refriegas. 17.999,10 euros por las alegaciones al TR-1. Unas alegaciones que contaron con reuniones y ayudas varias de técnicos del régimen. Ya se sabe lo que se gestó en Arona tras caer el secreto de sumario. Nelson Díaz Frías es un héroe de nuestro tiempo. Un horror. Auténtico. Es el carnaval de la corrupción. Y los dos técnicos ya han pasado por la cárcel: Roberto y Elíseo.

5 de noviembre de 2010. Coderch está en entredicho. Pero no importa. Se le pagan 9.450 euros por “ejemplar en papel y en formato digital de documentación complementaria del TR-2 del PGO”. Es el texto de los constructores, ya conocidos por sus manejos en las escuchas del sumario del caso Arona. Paco Santamaría y José Antonio Reverón tienen los días contados. Agustín Marichal y el clan Llongueras prepara el golpe de estado con la complicidad de Caballo Loco que se ha jurado el exterminio de ambos. Salen más denuncias contra el PGO y se suceden declaraciones y contradeclaraciones a cuenta de este documento. Queda poco para las elecciones y el PGO sigue sin aprobarse de manera definitiva.

31 de marzo de 2011. Ya queda poco para la cita electoral. El PGO no se ha aprobado definitivamente. Pero la batalla contra este documento se cobra la caída de Paco Santamaría, el abandono de José Antonio Reverón del PSC-PSOE, y abre la llegada de Marichal y Mena al partido y de nuevo se produce la victoria clientelar de Caballo Loco, meses después. Mientras se le pagan 59.062, 50 euros por “contestación alegaciones al documento completo del TR-2” y cuatro ejemplares de la memoria de información pública.

En total se han desembolsado 694.772,91 euros en diez años. Y el Plan sigue ahí, pendiente de su aprobación final, que ya vende CC a todas horas, ocultando todo lo que se oculta detrás y que hombres como Coderch hacen posible, poniendo su prestigio profesional al servicio de los más terribles intereses. Y como ya se sabe, todo tiene un precio. Y si se ha pagado, que Caballo Loco y los suyos lo asuman.