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Solo a semejantes botarates políticos se les puede ocurrir intentar frenar y represaliar a sus críticos y denunciantes anticorrupción ¡con una querella consistorial ilegal! 😆
Y encima de que se empeñan en recurrir a título personal el archivo de esa denuncia no ajustada a derecho, pasan de subsanar los defectos que imposibilitan que prospere (que a todo eso, me quedo con las ganas de vivir ese juicio, porque si en la forma presentaron una piltrafa de denuncia, en el contenido, uffff, para troncharse).
Para descargar el auto en pdf, hagan clic en este enlace: Auto de la Audiencia Provincial tinerfeña que confirma el archivo de la querella surreabertista y que condena en costas por temerarios al primer teniente de alcalde y al exalcalde aronero inhabilitado por prevaricador .
El exalcalde de Arona, Berto González Reverón, y su gobierno de CC empezaron intentando que los juzgados desconvocaran una manifestación anticorrupción e intentando censurar y asustar a sus críticos y denunciantes con una embestida penal por inventadas injurias, calumnias y coacciones «psicológicas» así como con una petición de indemnización de 500.000 euros, y han acabado palmando pasta de su bolsillo y con calificativo oficial y en firme de temerarios. ¡Sosárcenas y Bertorrente en acción!, jajaja. Insisto en mi reivindicación de siempre: ¡un politicomio ya, que este tipo de políticos son peligrosos hasta para sí mismos! Así va Arona…
Lo mejor del desenlace de esta persecución judicial (aparte de la satisfacción de poderme reír de mis cutre-querellantes a carcajadas 😉 ), es que el trío de abogados de lujo que nos ha defendido a lo ONG, o sea, sin esperanzas de ver un duro porque somos todos unos desgraciaditos económicos, por mero apoyo/solidaridad hacia nuestra lucha anticorrupción y anticensura, ¡al final van a cobrar por cortesía de nuestros querellantes! Desgobernantes que, además de tragarse la rabia y el ridículo con este patinazo judicial, van a tener que rascarse sus bolsillos para premiar como es debido a nuestros defensores. Jajajaja, si es que es de chiste…
500.000 gracias a nuestros súper abogados: Pedro Fernández Arcila, Felipe Campos Miranda y Jerónimo Oliva Fumero.
Y las mismas gracias a nuestros denunciantes por el detallazo de hacerme compartir querella con un equipazo fantástico que me ha hecho llorar de risa cada vez que salía a relucir nuestra chistosa querella: José Antonio Reverón (el concejal de Ciudadanos por Arona que ha aventado en los juzgados los escándalos de corrupción del municipio) y tres aroneros que han demostrado que desde la calle y desde las redes sociales se puede hacer un inmenso trabajo de concienciación contra las ilegalidades, contra la manipulación política de la verdad y contra los abusos e injusticias consistoriales: Julio Concepción (Sí se Puede), Sergio Cabrera (también de Ssp) y Bentor Trujillo (ANC).
Y claro, gracias a todos los que nos han apoyado y a quienes han confiado en mí a pesar de mi singular risastencia (no todo el mundo entiende que el humor es una cosa seria), a pesar de que lo ventajoso en Arona y en Tenerife durante la pasada década era reír la gracia a los corruptos que mercadean con lo público y, como ha quedado demostrado en este caso, a pesar de que llevar la contraria a ese tipo de gobernantes sin escrúpulos morales ni legales les ha expuesto a represalias demasiado a menudo viviendo en supuesta democracia.
Y hoy que estoy generosa, aprovecho también para dar las gracias a los grupos políticos de la oposición tipo casta por animarnos desde la sombra a criticar y denunciar en los juzgados, en las redes y en prensa -o sea, a hacerles el curro que deberían hacer ellos- (poniéndose sumamente pesados para que retomara la actividad bloguera cuando decidí poner la pluma hari a descansar), pero actuar públicamente como si nuestra lucha contra las deformidades democráticas de Arona y esta injusta querella no fueran con ellos. ¿Qué les agradezco? Que nos hayan demostrado a las claras que no son de fiar, sino unos frescos que solo miran por sus intereses particulares y electorales y que no tienen ni interés ni webos para plantarle cara a la corrupción (nada nuevo bajo el sol dadas sus siglas, aunque siempre resulta clarificador ver cómo actúan a la hora de la verdad).
Estos dos de Coalición Canaria se libran de que en España no sea delito la bobería política en sí misma, porque estoy convencida de que si lo fuera, no les daría la vida para cumplir condena.
Me encaaanta lo de la «temeridad evidente», jajaja. La han clavado los magistrados (y los legisladores 😉 ).