El alcalde les había prometido que cobrarían esta semana (tras incumplir la misma promesa la semana pasada)
Increíble, pero cierto. A pesar de la promesa del alcalde de que esta semana cobrarían sus nóminas, los 81 operarios del servicio municipal de jardines han acabado otra semana más sin ver ni un euro. Tres meses y medio sin percibir sus salarios. Y, de postre, una paga extra también sin cobrar. Venga, todos los jardineros de secano económico, para probar cuánto puede resistir toda esa gente en plan ahulaga (oséase, ‘julaga’) antes de palmar por inanición y por indignación. Y encima trabajando, que si no se arriesgan a ser despedidos…
Xdiossssssssss, esto es inhumano.
¡¡Pero cómo coño se pueden hacer las cosas tan mal!! Pero cómo pueden salir a la calle con la cabeza sobre los hombros los gobernantes que administran ese servicio público y los intereses de aroneros como los que trabajan en los jardines públicos??!! Si es que no se puede hacer una gestión más irresponsable y deplorable…
Degradación y Esperpento
Conversé anoche con uno de esos marchitos jardineros, y acabé sulfatada total. Su relato parece sacada de un guión de Buñuel sobre degradación humana, tipo El Ángel Exterminador. Aunque el esperpento de Valle Inclán también tiene presencia de sobra en este patético capítulo de la historia política y social de Arona.
¡Ni siquiera están recibiendo ayudas sociales! Ese jardinero me lo contaba, y no me lo podía creer. En su día (hace ya un mes, o sea, cuando llevaban dos meses y medio sin cobrar sus salarios), me escandalizó leer que el alcalde, Berto González Reverón, había encomendado a la beneficencia a esos operarios ¡de un servicio municipal! Pero es que resulta que ni eso! Aunque qué ilusa yo, pensar que los Servicios Sociales municipales están para atender nimiedades como ésta…
¡Y además han recibido reproches del alcalde por osar quejarse en voz alta en plena campaña electoral! He leído comentarios y mensajes en los que afectados por este desaguisado contaban que concejales y cargos de confianza de CC les habían increpado y hasta insultado cuando se concentraron para protestar frente al lujoso complejo hotelero en el que Berto fue coronado de nuevo como candidato a la Alcaldía. Pero este operario me explicó anoche que en las reuniones privadas que han mantenido con él y con otros concejales, los reproches y argumentos políticos han sido escandalosamente deplorables. «En una reunión un compañero expuso que su hijo precisa cuidados especiales y que no tiene para pagar el tratamiento, y que la leche especial que necesita tomar se la está prestando fiado una farmacia. Berto respondió que eso es un argumento fácil«.
Toma ya. Un argumento fácil!! Sinceramente, quisiera pensar que este jardinero exagera, porque me cuesta creer que incluso Berto pueda llegar a ser tan extremadamente cretino. Pero otros detalles que me contó, encajan con lo que ya habían relatado otros compañeros suyos sobre los reproches que les ha hecho el alcalde por haberle ajado su faraónica presentación con una manifestación ilegal.
Está visto que algunos no han aprendido aún que los dramas humanos y sociales están por encima de sus intereses electorales. No puedo evitar recordar a Eduardo Zaplana diciendo tras los atentados de Madrid de 2004 que las concentraciones de protesta desarrolladas el día de reflexión electoral eran «ilegales e ilegítimas», y asegurando que se trataba de «antidemocráticos actos de presión sobre las elecciones». Claro… en elecciones la población se tiene que tragar la rabia; es que a quién se le ocurre salir a la calle a protestar ilegalmente. (No comparo la tragedia de los atentados del 11-M con los impagos a los jardineros municipales de Arona, pero sí la pésima reacción de los gobernantes frente a las protestas ciudadanas).
Y amplío la crítica: Ningún grupo político de la oposición ha dado la talla en el drama de los jardineros. La culpa de lo ocurrido es de los gobernantes que han montado el pifostio (es difícil hacer tantas cosas mal). Pero una vez visto que no dan para más, ningún grupo de la oposición ha levantado la voz contra lo que está ocurriendo (fuera del salón de plenos) ni ha propuesto soluciones factibles para dar respuesta al impago de nóminas.
Fiestas con dinero público
Aunque bueno, también hay quienes piensan que los jardineros se quejan por vicio. El gobierno aronero de Coalición Canaria más no ha podido hacer para levantarles el ánimo con fiestas y espectáculos en los que, incluso, dan de comer a los asistentes (porque gestionar los servicios públicos no es su fuerte, pero montar fiestones con dinero de todos…). Anoche, sin ir más lejos podrían haber ido a cantar, bailar y comer a la grabación de Tenderete en El Fraile (aunque no fueran expresamente invitados por CC, sí lo hizo el CAN) o al pedazo de fiestorro organizado en La Camella. Aunque bien pensado, igual es mejor que no vayan a esas fiestas, pues capaz que con su desánimo logran aguar la fiesta a quienes sí cobran y reciben agasajos del Ayuntamiento…