Ordenó que los informes jurídicos se limitaran a expresar solamente si el procedimiento de tramitación cumplía la Ley
Caray, si es que no gano para asombros. Y eso que cada día creo que el alcalde (Berto González Reverón) y los suyos han agotado mi capacidad para asombrarme con sus disparates… ¡Ha pretendido aprobar el Plan General de Ordenación sin tener informes municipales sobre la legalidad de su contenido!! Total, un detallido de nada. Porque a ver, ¿A quién le va importar que ese planeamiento recoja una o 10.00o ilegalidades? Para Berto está claro que eso no es importante. Y que lo realmente fundamental es (o era) que el documento entrara en vigor lo antes posible… Porque ya saben, si se pone uno a cumplir la legalidad a rajatabla, el proceso de aprobación se demora, …
Y como los planes generales urbanísticos apenas suelen incurrir en ilegalidades, para qué perder tiempo en nimiedades? Jajajajaja.
Luego les cuento el decreto que firmó para evitar que los juristas municipales perdieran tiempo con boberías de tipo legal cuando lo apremiante era que entrara en vigor sin más vacilaciones (el decreto en cuestión data de 2005)…