De los varios cientos de aroner@s afectados por el drástico recorte bertista a la oferta de cursos y actividades del Patronato de Cultura, éstas son las primeras que protestan públicamente

Siete vecinas consiguieron que el pleno del jueves se hiciera incómodo para el gobierno bertista por plantarse durante toda la sesión delante de los políticos (del gobierno y de la oposición) con pancartas en las que reclamaban sus cursos de pintura en El Fraile.

Su reclamación puede parecerle a muchos una tontería y hasta un despropósito en tiempo de crisis. Pero no, el asunto es importante y grave…

Estas vecinas en particular protestaron por la supresión de un servicio público, en este caso, una actividad lúdico-cultural. Porque como siempre, de lo primero que se recorta es de la cultura. De la oferta cultural que no garantiza votos ni aplausos masivos ni baños de multitudes a los gobernantes (los tenderetes, benaventes, espectáculos y conciertos, son otra cosa). Protestaron por la continua pérdida de cotas de su miniestado de bienestar.

El Fraile: Ni centro cultural, ni instituto, ni campo de fútbol, ni cursos culturales.

Porque ya me dirán cuál es el Estado del Bienestar de los ciudadan@s de El Fraile, esos cuyo campo de fútbol está en ruinas y empantanado por unas obras paralizadas desde hace años porque el Ayuntamiento no pagó a la empresa a la que le había encargado la ambiciosa reforma del campo del Ibarra (apoyo al deporte, sí señor). Y esos cuyo centro cultural lleva años cerrados por otras obras que quedaron a medias. Ese Fraile cuyos estudiantes de secundaria corren desde hace tiempo riesgo de electrocutarse porque reciben su servicio público de Educación en el instituto de containers de Guaza que va a ser cerrado por los problemas de seguridad de su sistema eléctrico (problema que, como manifiestan alumn@s y profesores, está mal desde hace años, no de poco pa’ca).

Y eso contando que cursos como el de pintura no eran gratuitos, sino que estaban sujetos al copago. Creo recordar que me dijeron que cada alumn@ pagaba unos 200 euros por matrícula pictórica, pero no pude anotar la cantidad, y ahora no estoy segura 😦 .

Las vecinas pictóricas explicaron tras el pleno que ahora si quieren seguir con su curso, tienen que desplazarse hasta San Miguel, seguramente hasta la Casa del Capitán. Qué curioso, no? El Ayuntamiento de San Miguel, mucho menos potente presupuestariamente que el de Arona y con tasas e impuestos mucho más bajos que los de Arona, sí puede mantener cursillos culturales como ése a pesar de la crisis…

Estas indignadas culturales, como manifestó alguna de ellas, reprocharon al alcalde en el recibimiento que les hizo antes del pleno que para sueldos y abogados sí hubiera dinero, y que para la cultura no. Además, lejos de sosegarlas con sus artes de pobre víctima que se ve atado de manos para hacer lo quisiera (ese papel lo suele bordar), lo que consiguió el alcalde en esa reunión fue crispara a estas vecinas de Arona (jajajja, y seguimos con lo de quién crispa 😉 ). Por lo visto, les dio un sermón sobre la necesidad de hacer recortes en tiempos de crisis, y les dijo en tono de desdén que «la pintura chilena también es importante» y no se está haciendo nada para potenciarla, poniendo en cuestionamiento que su curso pictórico fuera el único que mereciera apoyo público en Arona. A las alumnas eso les sentó fatal, y no dejaban de refunfuñar que si acaso el macramé sí es importante (¿? ¿El gobierno bertista ha salvado el macramé en la quema que le ha metido a la oferta cultural? Jajajajaj, no es que tenga nada en contra del macramé, pero no me negarán que resulta curioso).

Entre cientos y miles de afectados por los recortes en Educación y Cultura.

Lo grave es que tal recorte de servicios municipales a los aroneros, en este caso en materia formativa, lúdica y cultural, afecta a cientos de personas. Me parece que se han suprimido unos 40 cursos del Patronato de Cultura después de las elecciones de mayo. Ese dato aún lo tengo más en el aire que el anterior, porque me lo contaron entre cervezas, pero lo que sí es seguro es que han sido un puñado de cursos y que hay un mogollón de gente afectada (dije arriba cientos de afectados para no pasarme de exagerada, pero juraría que en una nota que publiqué hace unos años se hablaba de más de 4.500 solicitudes de inscripción a esas propuestas lúdico formativas y, supuestamente al menos, culturales.

Gobernantes como los de CC de Arona, de esos que dilapidan a mansalva dinero público en gastos que para nada o casi nada benefician a los ciudadanos (al contrario, nos cuestan mucho dinero), han dejado un reguero de desmanes y despilfarro de fondos públicos con los que se podrían haber pagado miles de cursos y profesorado cinco estrellas. Como ejemplo de esos disparates económicos que ahora pasan factura a los aroner@s de a pie, figuran los desmesurados gastos del alcalde y de sus gobiernos:

Resumen de despilfarro del gobierno aronero en propaganda, privilegios políticos y pifias legales.

– En un inmenso aparato municipal de propaganda bertista que incluye: Radio Berto (Radio Arona), Tele Berto (Tele Arona y, entre otras, Productora Berto-TV), Foto Berto, Berto Magazine en Red, Facebook Berto, Gabinete de Prensa y Protocolo para Berto (con el gran recorte bertista, han bajado de cinco a cuatro trabajadores en esta pata del aparato propagandístico), BertoWeb municipal,…

– En fondos de reptiles para controlar a la prensa supuestamente independiente (ésa que no ha dedicado ni una línea, por ejemplo, a esta protesta vecinal por un recorte que afecta a cientos y cientos de personas, aunque se apresuraron a dar difusión a la nota de prensa bertista sobre la ayuda para rehabilitaciones de emergencia de unos 10 vecin@s del municipio).

– En asistencia masiva a ferias como Fitur (o Putur, como la llama AronaLeaks).

– En sexo político de lujo (perdonando unos 300.000 euros de tasa de licencia al hotel que facilitaba habitaciones de lujo al alcalde -cálculo a la baja, que conste-).

– Minimizando y si es posible obviando las cuantiosas multas que podrían ingresar el Ayuntamiento de las empresas concesionarias que no prestan adecuadamente los servicios públicos que tienen encomendados .

– En abogados y asesores privados, incluso de Madrid, para la defensa de políticos-gobernantes imputados por corrupción con pruebas de culpabilidad ya indiciariamente acreditadas en su contra por el magistrado instructor de una de las múltiples causas judiciales abiertas contra este gobierno y contra su gestión (José Antonio Reverón pidió la relación de causas abiertas contra el Ayuntamiento dos días antes de que los bertistas de CC articulara una rueda de prensa para intentar desacreditarlo, jeje, a ver si estos de la oscura transparencia se atreven ya a pasárselos de una vez, y si logramos echarle un vistazo a su mochila 😉 ).

– En fiestas faraónicas electoralistas como la celebrada justo antes de elecciones para el feudo de votantes de la Tercera Edad en La Pirámide de MareNostrum (uy, el mismo complejo hotelero del programa municipal de sexo político de lujo) con ballé de Carmen Mota y Pepe Benavente incluidos, o como el pago por la grabación en Arona de programas televisivos de folclore (cuando estaba ya inaugurado el auditorio municipal).

– En indemnizaciones millonarias por convenios urbanísticos ilegales.

– En un palco fijo en el estadio del CD Tenerife y, cuando les parece, también en el Santiago Bernabeu.

– En catering para sus múltiples eventos, con comparsa incluida si vienen elecciones.

– En semanas de castillos hinchables y talleres para niños justo antes (y solo antes) de elecciones.

Y paro ya que me estoy cabreando, porque lo peor es que podría seguir enumerando cambalaches económicos durante horas (Por ciertoooo, en este pleno del jueves se pagaron unos cientos de miles de euritos por el inservible desmonte electoralista del solar de Cruz del Guanche en el que CC quería hacer creer que iba a construir un macro complejo deportivo, a sabiendas de que eso era inviable hasta que se aprobara el Plan General porque estaba sustentado en un convenio urbanístico ilegal y, además, en suelo no urbano. Uff, aunque ésta es una historia larga que ya les contaré (y que no fue abordada en el pleno del jueves, of couse).

Excusas ridículas e isultantes (de las que crispan 😉 )

La excusa del gobierno coalicionero de Arona de que son un ejemplo de austeridad al haberse cargado diecitantos cargos de confianza, es una barbaridad. Ya que haber mantenido la bestialidad de 24 cargos de confianza durante años y años en un municipio como éste es la línea de despilfarro bertista que nos ha traído hasta el actual Aronalipsis, cuyos vecinos tienen que desertar a municipios vecinos en busca de los servicios públicos culturales y formativos que el Ayuntamiento de Arona no puede dar por ruina económica: Y esto no afecta solo a alumnos como los de pintura, sino incluso a los aroneros inscritos en la UNED, quienes desde este curso tendrán que desplazarse a Granadilla para recibir la formación universitaria que Berto and company han masacrado y despreciado durante años hasta lograr que esa universidad saliera huyendo de este municipio apocalíptico.

La excusa de que la ruina económica es culpa de la asunción municipal de competencias que corresponden a otras administraciones, se vuelve insulto cuando, al mismo tiempo, gastan impresionantes sumas de dinero en campañas publicitario-propagandísticas en prensa que no sirven para nada y que, además, no son competencia expresa de ninguna administración (eso sin entrar en el resto de gastos, ya que lo de las comparsas, el ballet de Carmen Mota o Benavente, tampoco es que encajen entre las encomiendas asignadas a las administraciones locales).

Y la de la crisis económica mundial podría medio colar, si no fuera porque los ayuntamientos de los municipios vecinos no están teniendo que hacer recortes de servicios y personal tan drásticos como el de Arona (a pesar de que tienen muchííííííísimo menos presupuesto y de que su oferta formativa, cultural y lúdica siempre se ha mantenido a un nivel similar e incluso superior al de Arona).

Valor ciudadano digno de elogio en un régimen caciquil como Arona.

Total, que las aroneras que se plantaron en el pleno de jueves a reclamar su curso de pintura, tienen todo el derecho del mundo a estar indignadas y a poner verdes a sus gestores públicos, a esos que usan tan a menudo y con tanto descaro fondos y recursos municipales en su beneficio, y que además, sacrifican antes los servicios y prestaciones a los vecin@s que preciados recursos políticos como el carísimo aparato de propaganda bertista.

Es más, en mi opinión, estas ex alumnas de pintura de El Fraile han tenido un gesto de valentía digno de elogio. A la gente de la calle, la gente normal que lidia como simples y desvalidos ciudadanos con el Ayuntamiento y los gobernantes en un municipio de marcadas reminiscencias caciquiles en las que se gobierna a golpe de favores (no de derechos), hay que reconocerles el valor de levantar la voz para protestar y para dejar clara su indignación. Se arriesgan a que no enchufen a sus hij@s y maridos (o que los machaquen si por casualidad curran en cualquier cosa sobre la que el Ayuntamiento tenga influencia), a que no les den las mismas ayudas y subvenciones que a quienes halagan (y si las pelean, a que les cueste más obtenerlas), a que no les toque una vivienda de protección oficial de esas que suelen tocar a un perfil concreto de votante,… En fin, que enhorabuena.